Propinas en París: ¿deberías dejar propina?

Almorzar en un pequeño restaurante en el Barrio Latino o tomar algo sentado afuera de uno de los cientos decafés de París viendo la gente pasar es una experiencia bastante agradable que recomendamos insistentemente a los visitantes de París.

Normalmente la gran mayoría de establecimientos en la Ciudad Luz ofrecen alimentos y bebidas de calidad, así como también servicio competente, aunque en ocasiones puede suceder que no todo esté a la altura de tus expectativas. Por eso, cuando llega la cuenta y el momento de pagar, quizás te estarás preguntando: ¿debería dejar propina? y si así es, ¿cuánto?

En los restaurantes y bares de París las propinas ya están incluidas

En todo el mundo las costumbres de propina son distintas. En algunos países de Latinoamérica, lo común es dejar por lo menos el 10% del total de la cuenta como propina, y un 15% o más si el servicio fue excepcionalmente bueno.

En París, los restaurantes y bares añaden un cargo de servicio equivalente al 15% pero los precios que muestran al público ya lo incluyen. Esto es requerido por las autoridades de impuestos francesas para poder llevar un control sobre las propinas y poder hacer las recaudaciones correspondientes.

Al momento de recibir la cuenta, podrás ver claramente el cargo de servicio por el 15%, indicado por las palabras “Service Compris”, que siginifca “propina incluida” y de igual forma verás el cargo por el IVA, que también ya está incluido en el precio final.

En París nunca te llevarás una sorpresa cuando llegué la cuenta, lo que tenías pensado gastar después de ver el menú es justamente lo que deberás pagarás al final, ya con propina e impuestos incluidos.

¿Entonces no debo dejar ninguna propina?

A pesar de que ya está incluida la propina en la cuenta, una pequeña propina extra siempre es bien vista por los meseros. Puedes pensar de esta pequeña propina como una forma de decir “gracias” por un buen servicio, si es que estuviste satisfecho con la forma en que fuiste atendido aunque por supuesto, no hay obligación de hacer esto, es completamente opcional.

Estas pequeñas propinas son buenas para los meseros porque van directo a sus bolsillos, a diferencia del cargo de 15% mencionado anteriormente, que por lo general se divide entre todos los meseros y otro personal del restaurante o bar. De hecho, en algunos establecimientos los meseros no reciben absolutamente nada del “service compris”. En algunos casos los propietarios se quedan con la totalidad o una buena parte del cargo escudándose en las leyes francesas que no requieren expresamente que los ingresos por este concepto se deban repartir entre el personal.

Al final, cuando hayas pagado tu cuenta tu ya habrás cumplido con todas tus obligaciones, solo quedará a tu consideración si el mesero se ha merecido algo extra.

¿Cuánto debería dejar como propina?

Las propinas extra pueden ser cualquier cantidad que consideres apropiada según la calidad del servicio recibido: desde algunos centavos por un café y un trato amable hasta 5 euros (o incluso más) por una cena con un servicio excepcional.

En caso de que quieras ser especialmente generoso, una propina del 5 al 10% es más que suficiente para dejar en claro que el servicio te dejó muy satisfecho.

De nuevo, recuerda que no hay ninguna obligación de tu parte ni ninguna regla que establezca cuánto debas dejar como propina. La decisión es enteramente tuya.

¿Qué hay de las propinas en otros lugares?

Para muchos oficios, las propinas son un importante suplemento de ingreso. Los botones en los hoteles, por ejemplo, dependen en gran medida de las propinas pues sus salarios son generalmente bajos, cercanos al mínimo. Una práctica común es darles un euro por pieza de equipaje que te ayuden a cargar.

En un museo, si has tomado alguna visita guiada, podrías dejarle un par de euros al guía, siempre y cuando te haya dejado satisfecho.

Si asistes al teatro o a la ópera, puede ser una buena idea darle un par de euros al acomodador. Anteriormente ellos no tenían salario y dependían enteramente de las propinas. Ahora, aún cuando tienen un salario, generalmente ganan poco más del mínimo.

De igual forma, cuando asistes a eventos en donde alguien recibe y guarda tanto tu abrigo como otras pertenencias, es buena idea dejarles alguna pequeña propina.

Por último, los taxistas generalmente sí estarán esperando una propina de tu parte al final del viaje. Los ingresos de los taxistas no son especialmente altos y ellos apreciarán cualquier dinero extra. La regla general es darles del 5 a 10% del total de la tarifa.

En conclusión

Todo lo que aquí comentamos está basado en las experiencias de varios viajeros y en las costumbres de los parisinos. No obstante, de ninguna manera deberías considerar que se tratan de reglas estrictas que debes seguir al pie de la letra. Después de todo, una propina no es más que una forma de mostrar tu generosidad y el aprecio a la calidad de servicio recibido.

Al momento de decidir si debes dejar una propina o no, debes guiarte por el desempeño de quien otorgó el servicio. Si te trataron muy bien, adelante, deja la propina que desees, pero si estuviste insatisfecho, no temas a expresarlo, no dejes propina y así evitarás reforzar un mal comportamiento o servicio.
Si tienes alguna experiencia distinta con lo que aquí mostramos, no dudes en compartirla en los comentarios.

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